Add parallel Print Page Options

14 Aunque guardes mucha agua
para resistir el ataque,
de nada te servirá.
Aunque hagas muchos ladrillos
para reforzar tus murallas,
15 morirás quemada por el fuego
y destrozada por la guerra;
el enemigo acabará contigo
como una plaga de saltamontes.
De nada te servirán
tu fuerza militar y tus muchos soldados.

16-17 »Tus comerciantes y tus generales
son tantos como las estrellas del cielo,
¡pero en cuanto ven el peligro
huyen como saltamontes!
Todos conocemos a estos insectos:
en cuanto cambian de piel, vuelan;
en un día frío se paran a calentarse;
pero en cuanto sale el sol
emprenden vuelo y desaparecen.

Read full chapter